jueves, 22 de agosto de 2013

Resumen del libro Fisiología de la Conducta (Pág. 15-23).

El CEREBRO Y LA MENTE


Fue hace mucho tiempo que nuestros ancestros vieron por primera vez dentro del cuerpo humano para encontrar qué es lo que lo hace trabajar; ellos reconocieron que el interior del cuerpo humano se parecía notablemente al de un animal; también se dieron cuenta de que los humanos y los animales eran diferentes. Los humanos, pensaban, hablaban, planeaban, hacían leyes y peleaban guerras. Los animales, por otra parte, podían ser útiles les a humanos, proporcionándoles satisfactorios como alimento y ropa o dándoles diversión como mascotas e incluso podían ser peligrosos.
Mucho antes de que nuestros ancestros comenzarán a imaginarse cómo trabajaban sus cuerpos; habían llegado a la conclusión de  que éstos estaban habitados por almas o espíritus. La parte pensante de sus cuerpos no se vería la cortar o al abrir a un ser humano; incluso si se estaban buscando explicaciones anatómicas para el intelecto humano. Por tanto, las primeras personas que husmearon dentro del cuerpo humano no encontraron un órgano cuyo aspecto explicara nuestra singularidad. Eso no significa que nuestros ancestros no identificarán de manera adecuada a la cabeza como el sitio del pensamiento y de los sentimientos; porque después de todo, los ojos, y los oídos llevaban imágenes y sonidos al interior de la cabeza. Por tanto, parecía  que nuestras mentes o nuestras almas vivían en nuestras cabezas. Sin embargo, una aceptación general mas reciente; es que nuestros cerebros son la base y no simplemente el asiento, de nuestras mentes.
Una premisa básica de psicología fisiológica establece que nuestras mentes no son solo sino manifestaciones de cerebros humanos funcionando. La mente no controla al cerebro; ni el cerebro controla a la mente; sino más bien el cerebro, en sus operaciones, da lugar a la mente.
La autoconciencia humana viene vinculada con un sentimiento de especial discernimiento dentro del control de nuestra conducta. Nosotros somos libres para decidir, para hacer lo que queramos. Distinguimos entre comportamientos automáticos, reflejos, y aquellos que escogemos efectuar. Incluso cuando nos encontramos realizando, haciendo compulsivamente algo que no deseamos hacer, interpretamos a estos comportamientos como resultantes del fracaso de la voluntad; si sencillamente nos esforzáramos más, podríamos controlar nuestra conducta.


La Unidad de la Conciencia.

La comprensión humana también trae con ella un sentimiento de unidad de la conciencia; cada uno de nosotros es un individuo singular, con un depósito de recuerdos, necesidades, esperanzas y sentimientos. Nuestras personalidades pueden tener diferentes aspectos, y nuestros gustos pueden cambiar, pero para cada uno de nosotros nuestra mente resulta ser una sola entidad. Un ser humano no tendría problemas para reconocer por el tacto, en la oscuridad, objetos previamente vistos, pero no palpados; sin embargo esto no resulta generalmente cierto para algunos animales.
 La información acerca del ambiente es llevada al cerebro por los nervios sensitivos, y allí es analizada por diversos sistemas sensoriales. Estos sistemas ocupan partes relativamente bien delimitadas del cerebro. La integración de la información recibida por diferentes modalidades sensoriales se logra por medio de interconexiones entre regiones del cerebro que efectúan estos análisis. En efecto, estas interconexiones unifican nuestro conocimiento sensorial.

Dos mentes en una. Efectos de la División Quirúrgica del Cerebro.

La conexión más importante entre los hemisferios derecho e izquierdo del cerebro está constituida por el cuerpo calloso. Además de conducir información, el cuerpo calloso transmite en ocasiones una violente tormenta de impulsos neurales de un lado del cerebro a otro. En un intento de controlar este trastorno, se seccionó en forma quirúrgica el cuerpo calloso en varias personas no respondía a ciertos medicamentos.
Pudiera pensarse que tal operación alteraría la conducta de la persona en alguna forma claramente observable. En vez de ellos, estas personas se muestran bastantes normales, cuando menos para el observador casual. 
Aunque los lados derecho e izquierdo del cerebro operan independientemente después de que el cuerpo calloso ha sido seccionado, el hemisferio izquierdo, debido a sus capacidades especiales, domina la conducta de la persona. Ciertos mecanismos localizados en el hemisferio izquierdo son responsables de la comprensión y la producción del habla. Por ejemplo, el daño a una región del hemisferio izquierdo trastornará la capacidad de una persona de comprender el significado del habla, impidiendo el habla normal, aunque el paciente continuará siendo capaz de comprender palabras habladas. Sin embargo, la destrucción de las mismas regiones del hemisferio derecho, no produciría estas incapacidades. El hecho de que las incapacidades verbales de una persona sean contraladas por un hemisferio explica el cambio relativamente menor observado en estas actividades después de cortar el cuerpo calloso. Esta dominancia hemisférica normal del habla también explica el hecho de que una persona con el cerebro bisectado no da la impresión de poseer dos hemisferios que operan independientemente, ya que solo uno de ellos (el izquierdo) controla el habla. El hemisferio derecho no es capaz de expresarse verbalmente; es mudo.
Además de ser mudo el hemisferio derecho es un lector extremadamente malo. Debido a este hecho una de las primeras cosas que aprende una persona con cerebro hendido es sostener un libro con la mano derecha mientras lee. Los músculos de las manos y de las piernas están controlados principalmente por el lado opuesto del cerebro. Además, el hemisferio derecho es capaz de percibir, recordar, y también puede iniciar movimientos de la mano y del brazo que muestran l apercepción y la memoria.
Del mismo modo que determinado hemisferio controla los miembros del otro lado del cuerpo y recibe información sensorial de ellos, así los estímulos visuales localizados a la izquierda y derecha del punto de fijación son trasmitidos al hemisferio contralateral. Si vemos directamente hacia adelante, el hemisferio izquierdo ve los objetos hacia nuestra derecha, y el derecho ve los objetos situados a nuestra izquierda. Por tanto, a los hemisferios cerebrales de un paciente hendido se les pueden presentar diferentes estímulos visuales.
Comunicación entre Dos Mentes en Una Cabeza. Aunque los hemisferios de un paciente con cerebro hendido ya no se pueden comunicar por medio del cuerpo calloso, pueden a veces enviarse mensajes entre sí por diferentes medios. El hemisferio derecho escucha todo lo que es dicho por el hemisferio izquierdo, por supuesto, y comprende mucho de lo que se está diciendo. En ciertas  situaciones  el hemisferio derecho puede pasarle información al izquierdo.
Resulta bastante claro que una persona con cerebro bisectado posee dos mentes. Seguramente resultaría un subterfugio aseverar que no hay “mente” en el hemisferio derecho porque no puede hablarnos. Cada hemisferio puede percibir y reaccionar a su propia información input sensorial, y por tanto resulta factible que cada hemisferio tenga su propia conciencia.
La mente es el resultado de un cerebro funcional. El hecho de que desconectando los hemisferios se dé lugar a dos mentes distintas, con diferentes capacidades, memorias y probablemente personalidades, proporciona la prueba más persuasiva de que la unidad de nuestro conocimiento consciente es el producto de las conexiones de varias regiones del cerebro.

El Cerebro: Órgano de Decisión y Control.

El cerebro recibe información, toma decisiones y produce efectos. Las personas están muy familiarizadas con la información input de naturaleza sensorial: visión, audición, tacto. También estamos familiarizados con las órdenes del output del cerebro a través de los nervios que controlan los músculos con los cuales movemos nuestro cuerpo. Pero el cerebro también recibe información distinta de la trasmitida por intermedio de los nervios sensoriales y controla más que a los músculos esqueléticos. 
Los canales de comunicación del cerebro se clasifican en inputs y outputs y se subdividen a su vez de acuerdo con el medio usado para la transmisión neural y no neural.
Además de controlar los músculos esqueléticos los output neurales del cerebro también controlan músculos como los del intestino, el corazón, vejiga urinaria y el iris del ojo. El cerebro también controla los outputs hormonales de ciertas glándulas por medio de la conexión neural, produce y secreta hormonas propias, que controlan la producción hormonal de lóbulos anterior de la hipófisis. Las hormonas del lóbulo anterior, a su vez, afectan muchos sistemas fisiológicos del cuerpo. El crecimiento de los huesos, la maduración sexual y la regulación del equilibrio mineral del cuerpo, son algunos de los fenómenos controlados por el cerebro por intermedio de su influencia sobre el output del lóbulo anterior de la hipófisis. El cerebro también responde a otros influjos inputs no neurales, como la temperatura del cuerpo, la cantidad de oxigeno en la sangre y la concentración de plasma sanguíneo.



1 comentario:

  1. Piaget en sus investigaciones, se baso en el estudio de sus tres hijos, en su adaptación por medio de la asimilación y acomodación, sus procesos permitieron mantener el balance o comprensión del entorno con los esquemas. Aunque fue criticado por las limitantes de su investigación, sus teorías han sido empleadas de manera exitosa.

    Beatriz Hernández Herrerías

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